Toño el indetenible, seis bailes en un solo fin de semana

Mientras otros merengueros están de vacaciones en estos días, producto de la agotadora jornada musical de la Navidad, Toño Rosario no ha parado de trabajar en este mes de enero.
Y eso, que al “Kuko” le tocó amenizar unos 50 bailes en diciembre, pero él no ha reparado en el asunto de que se merece un descanso y ha “seguido de largo”, como se dice coloquialmente.
Es esto lo que deben tomar en cuenta aquellos que cegados por la adulonería y las prebendas, creen que en el espectro musical dominicano en estos momentos sólo existe para ellos un solo merenguero. Y saben a quien me refiero.
Fíjense ustedes que desde el pasado jueves hasta este martes último de enero Toño Rosario tocó seis fiestas, una detrás de otra, y no le importó que una de ellas fuera en una ciudad tan lejana como Paraíso, en el Sur Profundo.
Hasta allí llegó y desbordó toda su energía, que consigue gracias a su disciplina de ejercicios y comida “light”, que no le permite que se agote fácilmente.
Es decir que mientras otros dañan su organismo con “tripitas”, “chicharrones” y una buena “loma” de arroz, Toño gusta comer saludable y ello le posibilita su poder de resistencia para tantos bailes como los que realiza en estos días.
Por cierto, quiero aprovechar para reseñar una nota curiosa de Toño Rosario en una fiesta en Andy Ranch de Santiago, el pasado domingo.
Resulta que a su llegada al lugar lo estaban esperando dos pastores evangélicos, quienes le dijeron al merenguero que Dios le había puesto una misión con él y que debía este acompañarlos a un sitio desconocido para comunicarle la “buena nueva del Altísimo”.
Toño que es un hombre “chivo”, le dijo que le agradecía el gesto “celestial”, pero que es católico, y que no podía ir con ellos porque tenía que subir a cantar.
La verdad que muchos de los que nos encontrábamos allí, nos preguntamos qué hacían dos supuestos pastores de iglesia en un lugar mundano para ellos. Como que eso estaba raro.