El locutor y cronista de arte Santiago Pito Acevedo junto a su co-conductora Pamela Suárez ha tenido la idea de organizar una vez al mes la transmisión en vivo de su programa Salsa Latina, los domingos, por Latina F.M. de Bonao de 3:00 a 6:00 de la tarde desde la terraza de un lugar inusual: El colmadón "La Piñola", atrayendo una cantidad sorprendente de gente que se reúne allí a compartir en grupo la música, y la participación de importantes artistas y figuras de la salsa que acuden al lugar a darle calor al ambiente y a la gente.
Ayer estuvieron presentes y cantaron para la concurrencia y la audiencia de la emisora los salseros Alex Matos, Noemí Mieses, y Yohanka, una nueva propuesta de Gerardo Díaz, El Toro, y el vacilón que se armó fue sencillamente proverbial.
La gente baila, canta, toca instrumentos, provocando el interés con la transmisión de la emisora de los que se quedan en casa.
El lugar se llena, y a partir en que avanza la tarde continúan llegando vehículos de todo tipo, con personas interesadas en disfrutar el domingo en ese colectivo sabroso, que le ha permitido a La Piñola, acaparar una popularidad y una fama que nunca sus dueños se iban a imaginar.
Y es que aparte del soporte de venta que mueve la gente que acude al lugar, la presencia de las figuras que acuden convocadas por Pito Acevedo le confieren un "plus" que trasciende y se deja sentir en todo el pueblo.
Ya hasta gente de otras provincias se están acercando los domingos a La Piñola para disfrutar de Salsa Latina.
La popularidad del encuentro es tal, que ayer habían emisoras enlazadas transmitiendo el programa en Queen, en Brooklyn, Boston, y otras ciudades norteamericanas donde hay estaciones de radio online.
Y los salseros se manifiestan consecuentes y apoyan su movimiento, puesto que las figuras que participan, no están en la zona tocando baile, ya que acuden expresamente a contribuir con su presencia en el lugar.
Para la próxima entrega mensual en vivo desde La Piñola, Salsa Latina está anunciando a La Chiquito Team Band.
Lo cierto es que mientras los soneros y salseros estaban en la capital disfrutando de su habitual encuentro informal en Las Ruinas de San Francisco, en Bonao se manifiesta una réplica en menor escala, lo que pone en evidencia que la salsa sigue apostando al barrio, a la calle, al pueblo, con su desenfado e informalidad.
Joseph Cáceres / Merengala
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