Tal parece que el locutor que se identifica como Sandy Sandy manifiesta una marcada vocación para la controversia y los conflictos.
Eso de llamar al programa de Jochy Santos para decir que el concierto de celebración de los 10 años de Alex Sensation en la radio fue un fracaso, sin haber estado alli, contradiciendo a los periodistas que han destacado el éxito del mismo y a las casi 20 mil personas que abarrotaron la Arena del Madison Square Garden, que son testigos de que allí no cabía un alma, revela hasta que punto llega la irracionalidad, la desinformación de alguna gente que activa en el medio.
Peor aún es la actitud de irrespeto que Sandy Sandy asumió en contra de cronistas de arte, editores de espectáculos y gente importante del medio que estuvieron como testigos de primera línea de todo lo que allí aconteció.
Se pasa de la raya
Hay consenso entre los periodistas en el sentido de que lo de Sandy Sandy se pasa ya de la raya, y que con su actitud, de paso, le hace daño a Héctor Acosta, un artista que se maneja muy bien con lo prensa.
Ello en razón de que Sandy es el promotor musical de El Torito, al igual que de Frank Reyes.
Al despotricar de manera irracional en contra del espectáculo de paso está perjudicando al mismo Héctor Acosta, quien fue uno de los más impactantes de los artistas que desfilaron en el espectáculo.
La lectura que se le puede dar al asunto es que si el espectáculo fue un fracaso, entonces lo del Torito también fue un fracaso.
Por lo visto Sandy Sandy al querer escupir el espectáculo de aniversario de Alex Sensation no se ha dado cuenta de que, de carambola, está escupiendo su comida. (Joseph Cáceres)
Imaginate que se puede esperar de un burro asi como sandy sandy en el mundo de las comunicaciones,por gentusa asi es que Dominicana esta como esta,por ignorantes asi contaminando a los demas. Que pena
ResponderEliminarEse tipo es un Fiasco (Sandy Sandy), no se como que El Torito y Frank reyes lo tienen a su lado. Ese tipo le hace daño a cualquier persona, siempre esta resaltando las cosas mala no las buenas.
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