Anda un comunicador de radio del Cibao "dao al pecao" porque a un periodista, miembro de Acroarte, supuestamente le pagó por una boleta de los premios Casandra y ahora este le salió con el cuento que por estar dizque "inactivo" en la entidad no le mandaron entradas para la esperada gala del próximo martes.
Dice el afectado en cuestión que se siente "estafado" por el cronista de arte ya que le había abonado hace dos semanas el cincuenta por ciento del precio de la boleta, la que valoraron en común acuerdo en 600 pesos.
El asunto "horripila y mete miedo de verdad" como dice la famosa canción infantil de "El ratoncito Miguel", pues se supone que las boletas del Casandra no son para comercializarse ya que solo la reciben en calidad de invitación los miembros de Acroarte, artistas e invitados especiales.
Se parece a la acción de un presentador de la televisión cibaeña, al que sorprendieron en las inmediaciones de la Arena de Santiago vendiendo unas boletas de cortesía de un espectáculo que realizaría allí el Torito y que se las dieron para rifarlas en su programa.
¡Que vergüenza compañero, pena debe de dar!
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