Máximo Rodríguez, propietario de Montebar de Santiago, ve con buenos ojos que se le limite el horario de operación a los colmadones y "licore store", según declaraciones suyas recogidas por el portal imagenesdominicanas.com.
Anjá, pues claro que él va estar de acuerdo con esa medida si esos centros de expendios de bebidas alcohólicas están lacerando los intereses de muchas discotecas que abusan del bolsillo de parroquiano con los elevados precios de sus servicios.
De ahí que la gente está buscando alternativas de diversión en colmadodes y tiendas de licores donde se ahorran más de la mitad de lo que gastan en uno de esos lugares de entretenimiento.
Entiendo que son más que intesadas las afirmaciones de Rodriguez sobre el tema, que en vez de buscar culpables de la desgracia de los clubes nocturnos, mejor debieran moderar los precios de sus bebidas.
El asunto es cuestión de competencia, nada más.
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