Haciendo castillos de "Arena"

Maridalia Hernández es una artista exquisita. Es un orgullo para los dominicanos que esta tierra haya parido a una cantante de sus condiciones. Ella es inigualable.
Sin embargo, debió aprender de su experiencia en el Palacio de los Deportes de Santo Domingo, donde presentó su espectáculo "Libre" y que a pesar de su calidad la asistencia no fue la mejor.
Pues la historia la volvió a repetir el pasado sábado en la Arena del Cibao, en Santiago, un aforo con características parecidas en términos de su capacidad al Palacio de los Deportes, aunque más confortable.
En la Arena de Santiago Maridalia tampoco se acercó por los menos a la mitad de la capacidad del lugar que para shows, acoge alrededor de 9 mil almas.
Siempre entendí que el espectáculo de Maridalia Hernández, por su estilo sobrio, debió exhibirlo en un teatro.
Las arenas están reservadas para producciones más estridentes o en el caso particular para artistas del momento con un historial de taquilla debido a la popularidad de sus canciones.

Con Fefita querían también inventar
Aunque sea una leyenda de nuestra música, lo mismo considerábamos que era un suicidio para Fefita La Grande llegar a la Arena del Cibao dizque con un show fusionando el merengue típico con elementos sinfónicos.
Un inventó descabellado que por suerte fue abortado, al parecer porque se dieron cuenta que las condiciones no eran las mejores.
Está bien que Santiago sea la cuna del merengue típico, pero de ahí a tener la capacidad para llenar una arena solo a base güira, tambora y acordeón, eso estaba por verse.