Es sabido que la gala de entrega de medallas de los nominados del Casandra o "Casandrita" tenía sus días contados y de hecho el pasado año casi ni se celebra.
La Cervecería Nacional Dominicana, empresa que sustenta el premio ha venido dismuyendo su inversion en ese evento y no ha estado en esa de destinar más recursos que los necesarios para el que se considera el máximo reconocimiento de la labor de los artistas dominicanos.
Por lo que nadie se llame a engaño que la razón de su suspensión no es solo porque Acroarte ha querido sustituir el llamado "Casandrita" por un acto más discreto que se centre en reconocer a cinco miembros meritorios de su institución sino sobre todo a un asunto de recorte presupuestario.
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