¡Ah! esos parquímetros de Santiago…





Tengo a Santiago como una de mis ciudades favoritas en mis destinos dentro del país.
Es más, he dicho una y otra vez que el día que deje de vivir en Bonao, “terruño” del que nunca he podido desprenderme, pese a que desarrollamos nuestras actividades en Santo Domingo, me gustaría fijar residencia en la llamada “Ciudad corazón”.
Sin embargo, en Santiago le estan dando a uno en el mismo "Corazón". El visitar esa ciudad se hace ya muy difícil sobre todo si uno está transitando por la zona comercial y desea aparcar el vehículo por allí.
Los parquímetros que ha instalado el ayuntamiento resultan ser un dolor de cabeza. Esos aparatos solo aceptan monedas de 5 pesos, que equivale a veinte minutos.
Es decir, no puedes insertales monedas de a 1, 10 o 25 pesos en caso de quieres duplicar o aumentar tu duración en el parqueo.
Y vaya usted a ver si no cuenta con ese menudo. No consigue en la zona quien le cambie a monedas de 5 aunque le ofrezca algo a ganar.
A diferencias de otras ciudades desarrolladas como Miami, por ejemplo, el sistema de pago de estacionamiento te acepta todas clases de monedas.
Pero aquí, en vez de facilitarles las cosas a uno, se las viven complicando.
Otra situación que acontece y según me contó un amigo fue que le multaron porque no llegó a reinsertar una nueva moneda al haberse agotado el tiempo que tenía estacionado y apenas un día después se encuentra que su nombre está en un buró de crédito de esos que te sindican por “mala paga”.
El amigo pagó la multa, pero ha pasado casi un mes y su nombre continua ahí, “fichado” en el centro crediticio y no ha valido nada para que le arreglen eso. ¡Y todo por una moneda de cinco pesos!

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